Las provocaciones de la SET-TAM
José Ángel Solorio Martínez
La Secretaria de Educación de Tamaulipas (SET), Lucía Aimé Castillo Pastor –y su consorte– decidieron provocar al tigre: en una decisión unilateral –sólo de ellas; ni más ni menos: las Tachas bis, versión profe–, pararon los pagos y prerrogativas económicas de los maestros que tienen una representación popular.
En efecto: centenares de diputados, regidores, alcaldes y síndicos, fueron conminados a definirse por uno de los dos cargos. O regresan a las aulas renunciando a sus responsabilidades que les confirieron sus electores, o no se les cubrirán sus honorarios.
Alguien debería soplarle a Castillo Pastor y a su pareja, que no es una actitud que abone a la cordialidad –ya por si, deteriorada– entre la IV T y la Sección XXX del SNTE.
Como se tiene que recordar, el magisterio tamaulipeco se ha distanciado con la IV T, por la permanencia en la SET de una persona sin perfil y con debilidades afectivas que le han hecho delegar acciones fundamentales de la dependencia a su amiga más íntima. Esta persona, gana lo que nadie en la SET y tiene más capacidad de mando que la titular.
Esa acción, actuó como elemento de ruptura del magisterio con Lucía Aimé.
El magisterio regional, trabajaba para ofrecer un evento masivo a la candidata de MORENA, Claudia Sheinbaum Pardo en la capital del estado. Esto, ante la escasa potencia de los mítines organizados por MORENA y el inexperto, Marquito Batarse en el centro del estado.
Ante la actitud irrespetuosa y rupturista de las Tachas de la SET, los líderes del profesorado tamaulipeco, comunicaron al CEN de MORENA y al Comité de Campaña de #esClaudia, la prórroga de ese acto hasta que la diplomacia entre SNTE y SET vuelva a tomar el curso de la concordia y la paz entre gobierno y sindicato.
¿Quién apoya a la neo-panista Lucía Aimé y a su inseparable socia?
¿Posee tanto poder como para poner en riesgo la gobernabilidad de la entidad?
¿Aguantarán los profesores esa nueva afrenta de Castillo Pastor?
Abogados expertos en temas laborales, auguran una derrota de la SEP ante la Sección XXX. Explican los abogados laborales: sólo mediante un juicio, se puede retirar el salario de los trabajadores; funciona como medida legal, sólo cuando se trata de la pensión para alimentos.
De lo contrario: se incurre en un exceso de autoridad y en una responsabilidad oficial.
Otra más: el oficio en donde les comunicaron esa medida, iba fechada un día anterior a la ejecución del acto de la SET.
Es decir: no tuvieron derecho de audiencia, obligado en esos delicados casos en los cuales está de por medio el ingreso del trabajador.
Por lo pronto, la titular de la SET, ya revivió el rencor magisterial contra su persona y atizó el germen de la rebelión entre centenares de maestros que se reagrupan para regresar a las trincheras de la calle.
¿Vale la pena, hacer lo que hacen Lucía Aimé y quien la suple cuando no está en su oficina?
¿Es prudente cocorear a una Sección XXX, que está de mírame y no me toques?
¿Se ayuda, a #esClaudia en la comarca con esas conductas de hostigamiento gremial?
¿Quién manda en la SET, que soslaya los supremos proyectos de la IV T tamaulipeca?
El horno electoral, no está para bollos.
Se empieza a configurar un ambiente muy rasposo en la entidad. Se asegura, que el SNTE de la comarca, no romperá con Sheinbaum Pardo. Sólo que podría tomar un acuerdo doloroso para todos: los profesores de Tamaulipas, podrían quedar libres de colaborar con el partido de sus preferencias.
El asunto, parecería menor.
En el contexto sociopolítico local, no lo es: la cubertura de más del 90 por ciento de casillas de las 5 mil de la entidad, que los profesores operarían, podría obstaculizarse ante el encono provocado por la ira de Lucía Aimé.
Las Tachas de la SET, son iguales que las Tachas de la administración estatal: irracionales, obcecadas, erráticas –sus parejas deciden fallidamente– y enemigas del Ejecutivo estatal.
