Los acuerdos porteños
José Ángel Solorio Martínez
Tampico, es una zona bajo control político del PAN. Y al parecer: el 2024 seguirá siendo, el factor hegemónico. No se quebró la cabeza, el panismo, para solucionar lo que parecía un galimatías incomprensible e irreductible, que dimana del Ayuntamiento
-tamaulipeco en general- y en particular, de la ciudad y puerto más relevante del Golfo de México.
¿Cuál fue el secreto de la ola azul, para mantener el equilibrio porteño?
No fue tan sencillo; sí, fue muy funcional: dejar a Chucho Nader, conducir y resolver el proceso de elección de los candidatos tampiqueños.
Nader, operó la ruta a seguir, con -ni más ni menos- el líder nacional, Marko Cortés.
Estableció, Marko: Chucho, recomendará los candidatos a alcalde, a diputados locales y el diputado federal.
Más, aún: si es hombre, va Pepe Schekaibán; si es mujer, va la diputada federal, Rosa María González Azcárraga.
Otro acuerdo entre el factor porteño y el actor nacional: Nader, va; o por mayoría a la diputación federal, o a la senaduría por la vía plurinominal. El primer dinamitado ante escenario tal, es el actual senador, Ismael García Cabeza de Vaca, y disminuye la posibilidad -ruta plurinominal- del ex gobernador, Cabeza de Vaca, toda vez que se plantó en la candidatura al Senado de su esposa, Mariana Gómez Leal.
Con ese acomodo, se genera una zona franca entre el cabecismo y el grupo de Chucho Nader; es decir: entre el panismo fronterizo que tiene su asiento en Reynosa y el panismo de Nader, que tiene su sede en el puerto.
No parece estar mal el convenio: ambos sobreviven; ambos, superan un posible colapso ante la obtención de los mejores cargos, o por una o por otra corriente. Se infiere: para Cabeza la candidatura a la cabeza de la fórmula por el Senado, de Mariana Gómez, -se colige- las postulaciones de Reynosa y algunos otros municipios de mejor relevancia; y para Chucho: Tampico y sus candidaturas y casi amarrada su candidatura a la diputación federal por el puerto, o una viable posición como candidato plurinominal al Senado.
Se nota, que tanto Cabeza de Vaca, como Nader, les bajaron dos rayitas a sus protagonismos. Sensata postura: esa actitud, los lleva a ganar-ganar: ni Francisco pierde, ni Nader retrocede.
¿Quiénes son, González Azcárraga y Schekaibán?
Rosa, nació como política a la sombra de Nader. Ha sido impulsada por el alcalde porteño, desde sus inicios en la política local; es familiar de una de las estirpes más relevantes de la ciudad: los Azcárraga. (Como se sabe, los Azcárraga, son parte de una de las élites más potentes en el país: mueven un emporio nacional de medios de comunicación).
Pepe, es un cuadro político hecho por Chucho. Se puede decir, que es uno de sus alumnos más aventajados. Forma parte de una comunidad, que es pieza fundamental en el desarrollo de la ciudad. Nader, le ha construido un sólido puente de diálogo, con la corriente empresarial comandada por los Fleishman.
Como en ninguna otra parte de Tamaulipas, el PAN de la mano de Chucho, ha consolidado al panismo; tanto, que hoy es el único bastión imbatible que puede presumir el blanquiazul en la región.
Hay algunos Ayuntamientos, donde el PAN tiene enormes potencialidades -Mante, San Fernando y Valle Hermoso- y altos niveles de competitividad.
Pero el puerto, es un impenetrable búnker azul.
En Tampico, no se ve, por dónde puedan arrebatar el triunfo a las propuestas de Chucho.
Ese, fue el factor que orilló al convenio Cabeza de Vaca-Chucho. Las credenciales de Nader, convirtieron en bisutería las interpretaciones del cabecismo; abrieron posibilidades reales, para las candidaturas de Nader y sus aliados.
Bajo la coexistencia pacífica de Nader-Cabeza de Vaca, subsiste el sabio consejo de un buen político:
-Más vale un mal arreglo, que un buen pleito.