Por Pegaso
Al Teacher Dópez Lóriga:
Teacher. Vi y escuché con atención la entrevista que le hiciste al Presidente Municipal de Reynosa sobre el tema de la violencia.
Muchos de mis compañeros y yo tenemos la impresión de que eres un tiburón en las entrevistas, o como dicen en mi rancho, un coyote muy lampareado, con un largo y retorcido colmillo y que además, estás respaldado por un equipo de trabajo que hace su chamba al recabar la información que se suscita en casi cada rincón del país. Mis felicitaciones por eso.
La opinión general es que el joven Alcalde salió un tanto mal parado de esa entrevista. Alguien por ahí, de los que golpean por consigna, publicó en las redes sociales lo siguiente: “En Reynosa no pasa nada, es en los municipios de alrededor… Eso dice Makito”.
Paro hasta donde escuché, no fue eso lo que dijo Peña Ortiz y quedó fehacientemente demostrado que el comentario fue sesgado.
Sin ánimos de ser defensor de oficio, puedo asegurarte que la entrevista que le hiciste también tuvo un sesgo.
Un sesgo que pretendió demostrar que aquí, en Reynosa y en otros municipios vivimos en los tiempos del viejo oeste, donde en cualquier esquina y en cualquier lugar se andan balaceando, donde los ciudadanos no pueden hacer una vida normal y que vivimos en constante zozobra porque los narcos nos tienen arrodillados.
Créeme que no es así.
Teacher. Desde que iniciaron estas manifestaciones de violencia, porque el Cártel Jalisco Nueva Generación quiere entrar a este territorio para arrebatárselo al Cártel del Golfo, solo he leído en redes sociales y escuchado de la gente que hay balaceras esporádicas en algunas colonias. Pero tales eventos duran apenas unos cuantos minutos y después todo vuelve a la calma.
Ya son cinco días los que han transcurrido desde que empezaron esas acciones criminales. Es más, a la fecha, no se ha demostrado que, efectivamente, el CJNG esté detrás de todo este embrollo. Se confiscaron vehículos con esas siglas, pero eran letras mal dibujadas con pintura para zapatos sobre los vidrios o paneles laterales.
Yo he andado de arriba para abajo, en automóvil o en el transporte público y ni siquiera me he topado con una situación peligrosa.
Te puedo asegurar que hubo tiempos mucho más terribles, donde sí ocurrieron bajas civiles que las autoridades consideraron como “daños colaterales”.
Pero en este momento solo son casos aislados, al menos en esta ciudad.
En Reynosa, a diferencia de Matamoros, no han bloqueados las vialidades ni ha habido muertos en estos cinco días.
Pero créeme, si yo hubiera sido el Alcalde de Reynosa, te hubiera hecho una muy atenta y cordial invitación para que te vengas una temporadita por acá, donde aseguras que estamos en una especie de zona de guerra.
Si es así, tu vasta experiencia como corresponsal en zonas de conflicto te hará sentir como en casa. Si no, tendrás la oportunidad de constatar con tus propios ojos y oídos que no todo es como dicen en las redes sociales.
Sí, hay violencia, como en muchas otras partes del país, e incluso la Ciudad de México abunda en pandillas y cárteles de todo tipo, pero los noticieros no dicen nada para no ahuyentar al turismo.
Veo como una intención bien marcada de los noticieros nacionales de pintar a Reynosa como una sucursal del infierno.
Por eso reitero la invitación. Échate una vueltecita para acá. Se te pagará el hotel y la comida. Pero tienes que prometer que andarás reporteando tú mismo en las fuentes policiacas, sin camioneta blindada, ni nada por el estilo. Para que veas que no es lo mismo estar en la comodidad de tu oficina de la Ciudad de México, exigiendo a tus corresponsales información delicada, a estar personalmente en el lugar donde ocurren los hechos.
Y de paso te traes a tus cuates Adela Michu, Trozo el Payaso Cochambroso, Loret de Mula, Héctor Aguilón Candil y Pepe Tárdenas.
Sin más por el momento, quedo como atento y seguro servidor.
Pegasiux de Petatiux
(Rúbrica)