por Carlos G. Cortés García
¡MÉXICO, EL PAÍS MÁS PELIGROSO DEL MUNDO PARA LOS PERIODISTAS!
· En este Día del Periodista, recordamos que México no es un paraíso para el ejercicio de la información. Por el contrario. Es México, junto con Afganistán, las naciones del mundo de mayor riesgo para los informadores, lo que ha llevado que en los últimos cinco años, en tierras aztecas, 47 compañeros, entre ellos, 6 mujeres, hayan sido asesinados.
Este 4 de enero se festeja, celebra o conmemora, como Usted deseé decirlo, el Día del Periodista en México. Un día que debe ser de gran importancia, porque representa el esfuerzo de muchos hombres y mujeres dedicados a la noble tarea de informar, tarea que por cierto en los últimos años ha querido ser vilipendiada por muchos, aunque difícilmente habrán de lograrlo. Una golondrina no hace verano y el periodismo en México es una actividad que lleva décadas de ayudar a construir a este gran país, con todos los defectos y vicios que se le puedan señalar, pero a final de cuentas, es preferible tener periodistas que no tenerlos.
Pero no es un día de campo ejercer el periodismo en nuestro país debido a que México se ha convertido, por tercer año consecutivo, en el país donde más periodistas han sido asesinados, según el balance anual de la organización Reporteros Sin Fronteras, cuyo secretario general, Christophe Deloire, consideró una «hecatombe» la situación de la prensa en este país y pidió a las autoridades mexicanas aplicar medidas radicales para ponerle fin a la violencia contra los comunicadores.
Deloire ha calificado lo que pasa en México “como terrorífico”. Según los datos de Reporteros Sin Fronteras, el 65% de los periodistas asesinados fueron deliberadamente señalados y eliminados. Es tan grave la violencia que se ejerce contra los periodistas en nuestro país, que Deloire, asegura que México y Afganistán, fueron durante el año 2021, los países más peligrosos del mundo para ejercer la comunicación. Asimismo, mientras México y Afganistán se llevan el Oscar de la violencia contra periodistas, India y Yemen comparten la nada honrosa tercera posición, con cuatro periodistas asesinados, cada uno. La diferencia entre el primero y el tercer lugar, es abismal.
Con siete nuevos periodistas asesinados en 2021, y un total de 47 muertos en sólo cinco años, México mantiene, por tercer año consecutivo, su liderazgo como el país más peligroso del mundo para ejercer el periodismo.
Sirva este espacio para recordar a los compañeros que ya no están entre nosotros, por dedicarse al ejercicio del periodismo y que por ello perdieron la vida. Ellos son: Fredy López Arévalo, de Chiapas; Manuel González Reyes, de Morelos; Jacinto Romero Flores, de Veracruz; Ricardo López Domínguez, de Sonora; Saúl Tijerina Rentería, de Coahuila; Gustavo Sánchez Cabrera, de Oaxaca; y Benjamín Morales Hernández, de Sonora.
Por cierto, en los últimos cinco años, de un total de 47 periodistas asesinados, seis fueron mujeres.
Hoy urge una postura por parte del Gobierno Federal sobre el tema, en el Día del Periodista y que ésta se replique a los gobiernos de los estados. Y es que el gremio periodístico no pide otra cosa que no sea contar con las garantías necesarias para poder ejercer con seguridad nuestra labor profesional. Ojalá y la administración federal del presidente Andrés Manuel López Obrador logre bajar los indicadores en el tema de homicidios de periodistas. Le quedan tres años valiosísimos a este Gobierno, para darle satisfacción, entre otros sectores sociales y profesionales, a los comunicadores. ¿Qué hace falta? ¿Voluntad política para defender a los periodistas? ¿O que el titular del ejecutivo federal entienda la importancia de que la sociedad mexicana cuente con comunicadores que permanentemente los comunique? En una de esas podría ser.
PD. 1. Por cierto, ciertos políticos “improvisados”, tratando de quedar bien con el gremio, a quien, en tiempos de paz y de campañas, ignoran y desprecian, cometen un traspié tras otro. Es el caso del reynosense Benito Sáenz Barella, quien de botepronto googleó en una cuenta de WhatsApp una imagen del Día del Periodista, pero de Perú, fecha que se festeja el primero de octubre. ¿Se habrá sentido Benito “El señorito Lauro”? Es decir, Benito fue tan desaseado en “sus buenos deseos”, que ni siquiera observó el origen del gráfico y la fecha impresa en él.
Sin embargo, minutos después, Sáenz Barella rectificó. Y entonces puso en el chat otra imagen, ahora si de México, pero diseñada por el Gobierno del Estado de Querétaro. Y luego no quieren que la raza brinque. Más falso no se pudo ver Benito, quien aspiró a ser presidente municipal de Reynosa. ¿Se imagina a Benito gobernando -o tratando de gobernar- con un modelo de África?
Ese es el problema de los políticos en México. Toman su responsabilidad con tal ligereza que cometen errores imperdonables. Ellos buscan llegar a los cargos y de ahí, pues que obre la buenaventura. Y no es que la felicitación sea tan seria como para desgarrarse las vestiduras. Por supuesto que no. El problema es que en los pequeños detalles se pinta a los políticos de cuerpo entero. Y Sáenz Barella es improvisado y no cuida su relación con quienes son importantes en la vida de un periodista, como los medios de comunicación. Cuando Benito puede obtener beneficios de ellos, lo hace sin miramientos. Y cuando se trata de tener un simple detalle con los medios, busca el camino al que menos le invierta tiempo y esfuerzo, aunque el resultado final sea generar el pitorreo del respetable. Con este intento de políticos, pobre Tamaulipas, pobre México.
PD. 2. Más allá de los diferendos políticos, los ciudadanos tamaulipecos saben honrar sus compromisos. Y ayer lunes 2 de enero, desde muy temprano, abarrotaron las oficinas fiscales del estado, en todo el territorio, para cumplir con sus obligaciones fiscales y cambiar las láminas de sus automóviles, aún y a pesar del llamado del presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso de Tamaulipas, Armando Zertuche Zuani, quien pidió no cambiar placas hasta que no se resuelva el veto a la modificación de Ley impuesta por el Gobernador del Estado, ese es su derecho y facultad, a una decisión de la fracción de MORENA en el Congreso que, me parece, debió de haberse consensado con el ejecutivo, para buscarle una salida inteligente.
Y es que, si le quitan al estado esos ingresos, no afectan al gobernador, pero si a los ciudadanos, a quienes les retiran la posibilidad de tener más obras y mejorar los servicios que presta el estado. Ser oposición, insisto, no es decir no a todo lo que promueva el ejecutivo por sistema, no es negarse a cualquier opinión o medida. Hay que razonar los temas, cada uno en particular, porque ser oposición debe ser entendido como sumarse a los proyectos positivos y buscar que, los que no lo sean, se conviertan.
Dice la Nana Goya que dos cabezas piensan más que una. Pero, sin ser mensaje directo para el Diputado Zertuche, se debe tener claridad de pensamiento para lograr los mejores acuerdos en beneficio de la sociedad a la que se sirve. Y vuelvo a preguntarme: ¿a poco si el gobernador fuera de su partido no aprobaría el cobro de las nuevas láminas vehiculares? Por supuesto que si.
En el Congreso Federal Zertuche no le dijo “No” al presidente López Obrador, aunque las medidas, los ciudadanos, las viéramos con un dejo de rechazo. ¿O sí? Y sigue pasando. Y para ejemplo, nomás hay que ver el enfrentamiento de los legisladores de MORENA y sus aliados contra el Instituto Nacional Electoral. Insisto. Para eso la naturaleza nos dio a los seres humanos de capacidad de raciocinio, para analizar, dirimir y llegar a acuerdos.
Y sería muy penoso para el Congreso, que los ciudadanos, a final de cuentas siguieran con el buen ejemplo de ir a cumplir con sus compromisos ciudadanos y fiscales. Y así como las oficinas fiscales han estado abarrotadas para pagar las nuevas placas, las tesorerías municipales han estado abarrotadas de ciudadanos que van a cumplir con su obligación de pagar el impuesto predial.
